• Activa2 y Ocupa2 ha sido posible gracias a Fundación ”La Caixa” a través de su Programa de Ayudas a Proyectos de Iniciativas Sociales.
• 20 trabajadores de la Fundación y 12 familiares formados en la metodología de apoyo Activo.
• 15 personas con grandes necesidades de apoyo han sido contratadas como validadores.
• Personas con grandes necesidades de apoyo evalúan la accesibilidad de la Biblioteca Municipal “Francisco Umbral” de Majadahonda y la Residencia de mayores de Majadahonda “Valle de la Oliva” de Grupo Albertia.

Activa2 y Ocuda2 es un proyecto orientado a aumentar la participación de las personas con discapacidad intelectual con más necesidades de apoyo de la Fundación. Este proyecto cuenta con la colaboración de Fundación ”La Caixa” a través de su Programa de Ayudas a Proyectos de Iniciativas Sociales.

El corazón de este proyecto reside en la aplicación de la metodología de apoyo activo para potenciar la autonomía de las personas con discapacidad intelectual con grandes necesidades de apoyo. Esta metodología requiere la implicación de todas las figuras de referencia de la persona con discapacidad, de modo que la implicación de las familias es una parte fundamental en las intervenciones.

Desde el inicio de este proceso se cuenta con la participación de la persona con discapacidad y su familia. Se comienza con una evaluación con la familia y la persona con discapacidad analizando sus rutinas y las necesidades de apoyo. Después se establecen los objetivos, asegurándonos de que la familia está de acuerdo con ellos.

María Ayuso, terapeuta ocupacional de la Fundación, nos explica algunas claves de este proceso:

“Es importante establecer un objetivo concreto, funcional y palpable. Además, la metodología requiere que todas las figuras de referencia estén perfectamente coordinadas y trabajen de la misma manera. Las intervenciones deben realizarse adaptándose al contexto y a los tiempos de cada persona. Por ejemplo: Si queremos mejorar la autonomía de una persona en la comida, la intervención debe aplicarse en el desayuno, la comida, la merienda o la cena; y no fuera de esos horarios”.

Los resultados de estas intervenciones no solo tienen impacto en las personas con discapacidad intelectual con grandes necesidades de apoyo, también en sus cuidadores principales. Patricia, la madre de Andrés, ha querido compartir con nosotros la valoración sobre el trabajo que se ha realizado con su hijo:

“Debido a una enfermedad visual, desde los 16 años, mi hijo se ha sometido a un total de 4 trasplantes de córnea. Desde entonces hay que administrarle gotas cada hora y media varias veces al día. Antes tenía que estar pendiente 24 horas al día del cuidado de los ojos de Andrés. Es vital para él dado que, de lo contrario, pueden producirse lesiones en cornea. El trabajo que se ha realizado con él, a través del proyecto, Activa2 y Ocupa2, me ha permitido no estar tan pendiente. Ahora Andrés es quien está pendiente del reloj, se encarga de ir a la nevera y pedirme que le eche las gotas. Para mí ha supuesto un descanso espectacular. Me siento más relajada y me siento muy orgullosa de Andrés”.

La formación de los profesionales y las familias es vital para lograr los objetivos establecidos con cada persona. Hasta la fecha, se han formado 20 profesionales y 12 familias en metodología de apoyo activo, en varias sesiones, virtuales y presenciales, impartidas por Laura Garrido, experta en esta metodología.

Otro aspecto que favorece la autonomía de las personas con discapacidad es contar con un entorno accesible y ha sido uno de los grandes retos de este proyecto. Cuando hablamos de entorno, nos referimos tanto a las instalaciones de nuestra Fundación, como a la comunidad en la que nos encontramos.

Nuevamente la participación activa de las personas con discapacidad intelectual es clave para obtener resultados significativos y reales. Andoni González, del Área de Calidad de la Fundación nos explica por qué:

“Contar con las personas con discapacidad para crear espacios accesibles tiene todo el sentido, ya que ellos mismos son los que nos van a indicar si la señalética y pictogramas en los que estamos trabajando son válidos o no”.

Y es precisamente en este punto donde abordamos otro aspecto fundamental cuando hablamos de potenciar la autonomía de las personas con grandes necesidades de apoyo, el empleo. 15 personas con discapacidad intelectual han sido contratadas por nuestra fundación para evaluar y validar la señalética y accesibilidad de estos espacios.

“Consideramos que, ya que estas personas con discapacidad intelectual son quienes realmente nos van a indicar si los espacios son realmente accesibles, lo justo es que les contratemos y cobren por ello”, explica Andoni González.

Durante el mes de junio se han evaluado las instalaciones de nuestras sedes de San Sebastián de los Reyes y Pozuelo de Alarcón, la Biblioteca Municipal “Francisco Umbral” de Majadahonda y la Residencia Valle de la Oliva de Grupo Albertia en Majadahonda.

Si bien es cierto que la contratación de estas 15 personas ha sido modesta (5 horas), el resultado de esta experiencia piloto nos ha permitido abrir camino en un grupo de personas en el que habitualmente no se plantean alternativas en el sector laboral. Andoni prosigue explicándonos lo que ha supuesto esta primera experiencia de empleo:

“Estamos muy satisfechos con los resultados de esta experiencia piloto. La respuesta de las personas con discapacidad intelectual que han participado en estas evaluaciones nos ha hecho ver que este es el camino. Tiene todo el sentido y merece la pena. Debemos tener en cuenta la contribución que están realizando las personas con discapacidad en esta materia, ya que la accesibilidad es algo universal en beneficio de todos. Cualquier persona, independientemente de su condición, podrá beneficiarse de estas adaptaciones”.

Una vez más, queremos dar las gracias a Fundación ”La Caixa” por ayudarnos a hacer realidad este maravilloso proyecto.